Cuando queremos cubrir una superficie de forma vertical, los toldos cortina son una de las soluciones más económicas. El mecanismo manual, muy simple y sencillo de manejar, se compone de un carril de aluminio que anclaremos a un techo o tubo de estructura y por el que correrán unas poleas con ruedecitas que a su vez van enganchadas al tejido de la cortina con unos ojetes. Son complemento para los laterales de pérgolas de aluminio y toldos planos de anillas.